Las funciones de flujo de trabajo integradas en la aplicación garantizan que determinados eventos permitidos se ejecuten en segundo plano sin ninguna intervención por parte del usuario. Las funciones que dependen de algún tipo de retroalimentación se llevan a cabo automáticamente cuando se recibe la confirmación. Un sistema de mensajería informa automáticamente al administrador del sistema de cualquier error que surja.

Todos los procesos que se ejecutan en segundo plano se muestran en el registro de eventos asignado al contrato correspondiente y el usuario puede verlos y controlarlos.

Una característica importante aquí es el control y la liberación de transacciones. La aplicación se basa en un principio de 4 ojos muy ajustado. Sin embargo, es posible asignar la responsabilidad de sus propias áreas de competencia a usuarios específicos. En tales casos, las transacciones se liberan automáticamente al salir de la transacción (es decir, después de guardar correctamente la transacción) y las funciones que normalmente se habilitan después de Control & Release se llevan a cabo automáticamente por el Workflow Manager.

Las transacciones que pasan por el proceso de control y liberación más normal se muestran al verificador. Los mensajes de 'Advertencia' que se muestran al usuario durante el procesamiento también se muestran al verificador. Lo mismo se aplica a los textos y campos predeterminados que haya cambiado el usuario. Por lo tanto, el verificador cuenta con una amplia gama de ayuda para poder comprobar dos veces las entradas de los usuarios durante el control y la liberación.

El flujo de trabajo se puede personalizar para satisfacer las necesidades individuales del usuario. Esto es especialmente importante a la hora de implementar ideas de impresión específicas.